Los años pasan, la tecnología
avanza a pasos agigantados y aparecen en nuestras vidas nuevos términos como es
la “identidad digital”.
“La identidad digital es lo
que somos para otros en la Red o, mejor dicho, lo que la Red dice que somos a
los demás. No está definida a priori y se va conformando con nuestra
participación, directa o inferida, en las diferentes comunidades y servicios de
Internet. Las omisiones, al igual que las acciones, constituyen también parte
de nuestra identidad por lo que dejamos de hacer. Los datos, por supuesto, nos
identifican. También las imágenes, su contexto y el lugar donde estén
accesibles proporcionan nuestro perfil online.” (por una ciudadania digital responsable)
Esa identidad podría reflejarse
en cualquier tipo de contenido que se refiere a la persona. Toda actividad generada en la red es el reflejo
de lo que somos y es imprescindible saber y ser consciente de la privacidad de los datos personales en
Internet y del uso que se puede hacer de estos datos se convierte en una pieza
clave para la gestión eficaz de la identidad digital.
En la red plasmamos datos de nuestra
identidad como la fecha de nacimiento, el lugar donde nacimos, etc. Pero nuestra
identidad digital es mucho más completa. Esto incluye nuestros gustos,
aficiones,... también la define todo aquello que nos gusta, como el tipo de
música, nuestras películas favoritas, el tipo de comida; todo esto confecciona
un mapa de quiénes somos.
Esta claro
que tenemos que enseñar a nuestros alumnos el buen uso de estar conectados, los
pros y los contras de las redes sociales,de los posts de un blog, los mensajes
de Twitter, los comentarios a vídeos, fotos ...,todo es importante;
que tipo de cosas dices, cuándo las dices, cómo las dices… y para ello tenemos que aprender
nosotros primero lo que entraña ese gran mundo desconocido para muchos, el
mundo de internet. Hay que proteger a los alumnos de nuevos términos como
cyberbulling, sexting…
Para todo ello tenemos que aprender nosotros
primero conocer todos los riesgos que entraña cada dato que plasmamos en al
red. Tenemos que aprender para poder enseñar a cuidar de nuestra huella digital.
Pero la cosa
no se queda solo ahí, hay que cuidar esa reputación digital, y la nuestra no es
menos importante. Como profesionales que somos, profesionales que creamos
precedentes para muchas personas debemos de cuidar nuestra “huella
en la red”. Somos profesores, personas
cuya referencia toman otras personas y tenemos que cuidar hasta que punto
queremos ser visibles.
Hola me gusta mucho tu reflexion sobre la identidad digital. Tienes razon en cuanto como docentes tenemos que cuidar bien la huella que dejamos en la red.
ResponderEliminarUn saludo
Has destacado el hecho de cuidar nuestra imagen y lo que publicamos, pero creo que también hay que incidir en la importancia de controlar la información que se publica de nosotros sin "consulta" previa...
ResponderEliminarTienes toda la razón Nuria, la identidad digital no se forma solo a partir de lo que hacemos nosotros mismos, cuanto hay que avanzar para poder marcar los limites en lo que se invade la intimidad de lo demás.
EliminarMe parece un buen planteamiento comenzar por nuestra propia identidad digital como principio para la enseñanza a través de las TIC. Es algo tan importante como peligroso para el alumnado, y ha de empezar en nuestra propia labor.
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